Sospecho que ha muerto una costumbre pachanguera: la siempre angustiante aspiración de sacar a bailar a una mujer.
Yo viví y a lo mejor tú también viviste esa emoción suicida de preguntarle a una chava: ¿Quieres bailar?. Era casi una declaración de amor a punta de pistola en donde el éxito se traducía en alinearte junto a tu pareja ambulatoria y compartir dos o tres rolas de los Hombres G, de Soda, de los Toreros Muertos o ya de perdido la de Súper Pato. Y todo este ritual dancístico entre adolescentes sucedía sin mirarse a los ojos.
- ¿Quieres bailar?- preguntábamos.
- No puedo porque mi amiga se queda sola.
¿Quieres bailar?
- No puedo porque ya van a venir por mí.
-¿Quieres bailar?
- No. No me gusta bailar.
En los ochentas para asegurar el metro cuadrado en la pista había que sacar a bailar no a la chavita que nos gustaba sino a la que le gustaba bailar. En mi experiencia hubo balas perdidas que atinaron a la buena voluntad de la más guapa y popular, pero generalmente mi riflesillo de postas apuntaba hacia el cervatillo más joven de la manada, hacia la presa fácil. O era mejor sacar a bailar a una amiga desgarbadona que a la buenota del Motolinía.
De la probabilidad de bailar pegados mejor ni escribo. Apenas sonaba aquella balada de Richard Marx y parecía que en la pista habían tronado un pedo químico pues todos los ahí presentes huían como si el contacto físico entre la mano y la hombrera causara herpes. Con las "canciones calmadas" quedaban en la pista sólo aquellos suertudos que tenían novia y que por lo mismo podían armar un simulacro de pre-faje melódico.
"¿Quieres bailar?" es la pregunta de doble filo que define la cacería afectiva de mis años ochentas.
Más tarde se puso de moda llegar a la pista acompañado apenas de tu cheve y ahí mismo zarandear la pelvis hasta que llegara una niña sin marca personal. Se puso de moda wild on y el "perreo", o bailar en bodas el "venado" y otros horrores. También se pusieron de moda los raves, el slam y el girl power que manda al cuerno a todos los hombres. Además, desaparecieron las pistas de baile y fueron relevadas por sillas, esquinas negras, pasillos hacia el baño, nichos cercanos a la barra. La gente empezó a bailar en donde se cena y se bebe, afuera de donde se mea, en las escaleras, en los barandales. El arte de bailar se comió el trámite de elegir a una pareja.
El otro día escuché una canción de Billy Idol lanzada en 1981 pero que yo bailé en algunos quinceaños entre 1987 y 1989. Hoy se la quiero dedicar a todos aquellos que como yo sufrieron el rechazo de alguna damita, a todos los que alguna noche curamos un "No" recargados en las paredes del Crowne Plaza, del Privatt, del Club de Leones, del Casino del Valle, del Casino Monterrey o de la cochera de la quinceañera.
Los puñetines aquellos urgidos de una compañera de baile tendríamos que hacerle homenaje a quien nos enseñó que está chido bailar solo. Más información AQUÍ.
Hello world!
Hace 1 mes
13 comentarios:
Yo odiaba que me sacaran a bailar en las fiestas de XV años porque las cosas se desarrollaban más o menos así:
-¿Quieres bailar?
-No sé bailar
-Ándale, yo te enseño
-Bueno, pero de veras que no sé ¿eh?
-Seguro que sabes, vente.
(Algunos pisotones, jaloneos, cuerpo más tieso que tabla de planchar y etcétera)
-Si quieres mejor nos esperamos a una canción más calmadita para que agarres bien el ritmo.
-...
Hoy, tantos años después, cada vez que sóla o acompañada tengo que pisar una pista de baile no puedo evitar recordar esos angustiosos momentos de las fiestas de adolescentes.
Un abrazote mi estimado!
gracias.. me moria por otro post.. te extraniamos mucho.
Pss... con lo que le hace falta bailar a esta generación.
Las niñas también sufrimos en la tortuosa espera de quién se acomidiera a decirnos "Quieres bailar?" A las cervatillas débiles como yo nos valía madre que nuestra amiga se quedara sola. Ella nos comprendía.
Pero que tal cuando no te sacaba a bailar nadie y eras la unica hay sentadota mientras todos bailabán, eso me pasó en la secundaría y era bien gacho, snif.
jaja
o que tal cuando ibas con tu amiga... y no podias bailar hasta que las sacaran a bailar a las dos =( Tenia que ir ahi el amigo buena onda al quite jaja.
O también era feo estar con la amiga bonita y que ella tu tuviera que conseguir bailador para no dejarte sola y bailar las dos.
Oh.... salieron a relucir los traumas jaja
Saludos
que buen viaje en el tiempo, a mì me pasaba parecido, porque nunca he sido bueno para el baile.
Saludos.
O bailando en bola, porque las compañeras, no nos pelaban, ni a mi ni a los cuates con los que me juntaba; los desmadrosos, alcohólicos adolescentes, berreando cualquier canción, debrayando hasta que alguna persona mayor nos pedía amablemente le bajaramos tres rayitas a nuestras payasadas o mejor nos retiraramos. ¡Ah, como envidiaba a Tin Tan!
Yo no soy de tus tiempo pero ahorita es horrible bailar, la peor experiencia del mundo.
Que onda con el perreo, o en los raves no entieno, o los super corridos pesados :´(
Desde que sali de la secundaria no bailo.
O LA MAMADA DE QUE NO TE OIAN Y SALIAN CORRIENDO ESTIRADAS POR LA MANO DE OTRA SATILLA QUE LE GUSTABA JODER O ESCOGERLE EL BAILARIN A LA AMIGA.....
LLEGO UN MOMENTO QUE BAJABA IR A ESOS FESTINES
Así como sufrían ustedes nosotras también cuando algunas nos la teníamos que pasar sentadotas toda la noche porque a nadie se le ocurre sacarte a bailar. Me acuerdo que me daba mucho coraje pensar que teníamos que esperar a que ustedes los chicos se les ocurriera sacarnos a la pista. Ya en la prepa mi hermano y yo optamos por ir a las fiestas juntos, si no me sacaban o a él lo rechazaban bailábamos cualquier rola, hasta de air supply nos aventamos.
Saludos!
jajaja así cambian las generaciones.
Tus post son de los pocos que me sacan carcajadas de verdad.
Saludos
uuuuuy a mí también me tocó eso todavía, me siento vieja. Pero igual que Ale, yo también lo odiaba, mis "no sé bailar" realmente significaban eso, nunca me hice del rogar, chavillos de mi pasado ¡Sépanlo!
¿cómo, ahora se necesita aprobación? me siento en una dictadura
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